EL RETO MÁS IMPORTANTE EN GANADERÍA ES INCORPORAR AL PEQUEÑO PRODUCTOR A LOS GRANDES PROYECTOS
David Monreal Ávila, Coordinador General de Ganadería, recalcó que desde la perspectiva del actual gobierno y la orientación de la política pública, el reto más importante para la actividad ganadera en el país es la incorporación de los pequeños productores a los grandes proyectos.
Destacó que la importancia de incluir a los pequeños productores, incluso a aquellos que realizan una ganadería de traspatio, radica en fortalecer la producción y productividad del sector para revertir el abandono que sufrió el campo en gobiernos anteriores.
“No estamos haciendo a un lado a los grandes productores, pero en la política pública actual no hay forma de financiar a los grandes proyectos porque están caminando por sí solos; la prioridad es incorporar a los pequeños productores a esos proyectos para lograr una igualdad”, mencionó David Monreal.
Asimismo, el Coordinador General de Ganadería estableció que actualmente el pequeño productor tiene un abandono abismal y es necesario impulsar las economías de traspatio para atender temas de sanidad, capacitación y asistencia a quienes tienen menos de treinta vientres. Todo esto con la finalidad de lograr una autosuficiencia para motivar e incentivar a estos productores a que puedan participar en la cadena productiva.
La importancia de este esquema, aseguró, es que no se busca la afectación de los grandes productores, sino revertir el fenómeno de la desigualdad en búsqueda de la autosuficiencia alimentaria que desde el Gobierno Federal, a través del presidente Andrés Manuel López Obrador, se busca conseguir.
“Si logramos que haya mercado, que haya precio y condiciones tecnológicas en el desarrollo y explotación para hacer competitivos a los pequeños productores podremos ir revirtiendo este fenómeno, aunque será todo un reto porque la tendencia del mercado actual motiva a que el grande productor siga siendo grande.”
David Monreal Ávila también aseguró que actualmente el campo y la actividad agrícola está llena de claroscuros, ya que en la balanza comercial de 2019 el campo fue el principal generador de riqueza del país y se logró que se convirtiera en el principal generador de divisa, a pesar de que México es deficitario en la exportación de arroz, cerdo, y otros productos.
El campo superó como divisa a las remesas, a la renta petrolera y al turismo, logrando ser superavitarios.
Sin embargo, los claroscuros radican en que sigue siendo el campo el generador de los mayores cinturones de pobreza y por eso se explica la desigualdad en la distribución de la riqueza en el campo, por lo que la insistencia en apoyar la economía de los pequeños productores se afianza en el esquema de conseguir una incorporación igualitaria que beneficiaría no solamente a los que producen, sino al mercado nacional y a la exportación.