Por Jesús Gómez

Director área de Recursos Humanos y del Servicio de Mentoring en Cerem International Business School

Cuando se decide emprender un nuevo negocio, bien sea en el seno de una organización ya existente o bien creando una nueva, es altamente recomendable elaborar un plan de empresa. Los beneficios de preparar este plan son múltiples, pero sobre todo nos permite valorar la viabilidad, técnica, comercial, operativa y financiera de la idea de negocio, afirma Jesús Gómez, Director área de Recursos Humanos y del Servicio de Mentoring en Cerem International Business School.

Para este análisis inicial de la idea podemos utilizar herramientas como el modelo Canvas que nos ayuda a generar el plan de negocio analizando la idea desde múltiples perspectivas:

Segmento de clientes que constituyen el mercado potencial. Nicho de mercado.

Propuesta de valor. ¿Qué problemas ayudaría a solucionar a los clientes una vez desarrollada la idea de negocio?.

Canales de comunicación. Aquí se trata de identificar los medios de promoción, distribución y lugar de prestación del producto o servicio.

Relaciones con clientes. Dónde, cuándo y cómo empieza, se desarrolla y se consolida la relación con el cliente

Fuentes de ingresos. Hay que identificar cómo se va a obtener el dinero y hasta cuánto esta dispuesto a pagar el cliente.

Recursos clave. Lo que necesitamos para llevar adelante el proyecto, ponerlo en marcha, mantenerlo en funcionamiento y hacerlo crecer.

Actividades clave. Hay que identificarlas y posteriormente aquellas que no contribuyan a generar valor para el cliente es mejor revisarlas o subcontratarlas.

Socios clave. Es difícil triunfar en solitario, por ello es conveniente identificar todos los agentes con los que se necesita contar para hacer posible el funcionamiento del modelo de negocio.

Estructura de costes. Después de todo el análisis anterior hay que calcular los costes que conlleva el lanzamiento y la consolidación del proyecto.

Una vez concretada la idea del negocio que se quiere crear y analizada la necesidad y potencial acogida de la misma en el mercado objetivo, hay que valorar la posibilidad de contar con los recursos humanos, materiales y financieros necesarios para desarrollar el proyecto empresarial.

Si alguno de estos análisis falla tendremos que mejorar o descartar la idea de negocio inicial y buscar alternativas.

Elaborar el plan de negocio ayuda a crear, consolidar y hacer crecer la idea inicial, asimismo suele ser un requisito indispensable para la solicitud de préstamos y ayudas o subvenciones, así como para presentarse a certámenes y premios para emprendedores y empresarios.